1 - Protector rotuliano extraíble. Centraliza y estabiliza la rótula, evitando movimientos no deseados.
2 - Barras laterales de acero en espiral. Estabilizan la articulación de la rodilla en dirección medial-lateral, permitiendo la libertad de movimiento en flexión y extensión.
3 - Cierres de micro-velcro posteriores. Adaptan la ortesis dejando la zona poplítea sin presión, para mayor comodidad.
Contusiones leves, lesiones femoropatelares. Tratamientos postoperatorios. Ligeras inestabilidades de la articulación de la rodilla. Durante el proceso de rehabilitación. Cualquier patología de la rodilla en la que se requiera centrar o descargar la presión en la rótula.